ARTROSCOPIA DE CODO

Es una cirugía de mínima invasión en la cual se utiliza una pequeña cámara llamada artroscopio para examinar o reparar los tejidos dentro o alrededor de la articulación del codo. El artroscopio se inserta a través de un pequeño corte (incisión) en la piel.

La artroscopia se puede recomendar para estos problemas del codo:

• Epicondilitis o codo de tenista.

• Inflamación o daño en el revestimiento de la articulación, generalmente causado por una enfermedad, como la artritis reumatoidea.

• Un tendón del bíceps dañado o roto.

• Inestabilidad del codo, donde la articulación del codo está suelta y se desliza alrededor demasiado o se disloca.

• Fracturas de la cabeza del radio o arrancamiento de la coronoides.

• Calcificaciones de los tendones alrededor de la articulación del codo.

• Ligamentos o cartílagos articulares dañados o rotos.

• Cuerpos libres articulares que necesitan ser retirados.

La artroscopia generalmente produce menos dolor y rigidez, menos complicaciones, hospitalizaciones más cortas y recuperación más rápida que la cirugía abierta.

Los resultados dependerán de la patología previa del codo pero son satisfactorios en más de un 90% de los pacientes tras seguir el proceso de recuperación pautado.